Ya está, ya pasó. El lunes asistí a mi primer gran mitin político en campaña electoral. ¿Los protagonistas? Pues Mariano y su compañía. Muchas conclusiones, reflexiones que intenté exponer de manera breve en las siguientes líneas.
En las gradas pocas caras jóvenes, todos eran jubilados metidos en autobuses desde diversos puntos de la provincia malagueña. ¿Qué clase de poder de convocatoria es este? ¿Dónde quedan aquellos días donde el candidato se subía en un autobús en mitad de una plaza para captar la atención?
Aplausos sin motivo, ovaciones para palabras vacías. Tú sí que vales… Presidente presidente… A ello se dedicó un público más preocupado por poner rojas sus palmas que por poner el oído y escuchar la gran falta de propuesta de su líder. Mientras otros bailaban entre banderolas azules el single del cambio: "Alfredo no te creo".
Mariano Rajoy vino tal como se fue, vacío a la par que lleno por verse en la Moncloa. Pero nada más. Y sus teloneros, Paco de la Torre, Celia Villalobos y Javier Arenas vinieron a presumir de lo que ellos también causaron. Un sinfín de tonterías, unos mítines que no aportan nada al electorado.
A un polideportivo se ha de venir con propuestas. Señor Mariano, si te voto ¿qué ganaré? No me vale cosas tan simples como un futuro mejor, como un cambio de lo peor porque más mal no se puede estar. Quiero propuestas, quiero invertir en becas de educación (ya que estaba en un centro deportivo universitario), quiero mayor inversión en Andalucía (cumpliendo así la constitución en el que se pide que se equilibren todas las zonas de España).
Pero en lugar de ello encontramos un… Voy a ser el próximo presidente de la Junta por Javier Arenas y poco más. Una ilusión desbordada sí, pero vacía a la vez.
A las puertas del centro deportivo de la Uma encontrábamos puestos que vendían banderas de España, Andalucía y el Partido Popular. Se hallaban también gorras de un azul claro con la gaviotas estampadas. Incluso botellas con el rostro de nuestro futuro líder. Así todos podemos brindar juntos por el cambio hacia lo desconocido porque somos españoles, porque somos aventureros y parece no gustarnos ver el camino a realizar.
Todo da igual desde Génova, no hace falta ni explicar ni reflexionar. Como una marea se dirigen a la Moncloa y con ellos sus desconocidas intenciones. Miedo me da un Gobierno de España que goce de mayoría, un ejecutivo que no escuche a los ciudadanos y que disfrute del mayor poder administrativo que en este país ha podido tener un partido político.
El próximo 20N ganarán sin haber dicho ninguna propuesta en extensión, ni siquieran se han molestado en mentir, en ilusionar a los ciudadanos. Un cambio habrá, pero, ¿hacia qué? Señor Mariano explique sus propuestas, no llene pabellones con jubilados sin obligaciones. Haz que vengan los españoles en busca de ideas para mejorar sus vidas, personas con un futuro por el que luchar.
La semana que viene quizás vaya a ver a Rubalcaba y al próximo expresidente Zapatero. Veremos a ver que nos traen.
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