De tortas va la cosa estos días en mi cuaderno, y es que el señor don Silvio Berlusconi fue sorprendido ayer por el pueblo al partirle la cara un hombre de unos 40 años durante un mitin en Milán.
Pasto de ovejas sería llenar hojas sobre los motivos de tal "cruel" agresión. Bastaría con decir esta cita de un libro que me estoy leyendo: para unos es el destino, para otros es la voluntad de Dios. Este se la ha buscado… por su riqueza y su locura.
Mi opinión és que tanto partir- le la cara, es un poco bruto. Pero lo que le serviría de escarmiento sería congelar-le todas las cuentas bancarias, diciendo todo el dinero negro que ha ido robando en todas sus décadas dentro el mandato como presindente.También quiero añadir que tendrían que prohibirle al acceso a todos sus negocios abiertos. Todo es una corrupción que nunca se termina y la gente por supuesto ya está cansado. Esto es todo lo que tenia que decir
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